La historia de Ángela

"Una mujer que no parece una sola sino muchas a la misma vez" me recuerda a la célebre frase que pronunció el poeta francés Paul Éluard "hay otros mundos pero están en este" y que encaja perfectamente cuando queremos hablar de la convivencia de muchas realidades en una sola. Realidades que son inseparables como reza el poema de Éluard:

"She looks into me
The unknowing heart
To see if I love
She has confidence she forgets
Under the clouds of her eyelids
Her head falls asleep in my hands
Where are we
Together inseparable
Alive alive
He alive she alive
And my head rolls through her dreams"

Ciertamente la vida de un individuo pasa por numerosas etapas, conocemos a multitud de personas que pasan, se quedan o abandonan nuestra vida de repente. Aprendemos muchas cosas que luego aprovechamos, construimos, desechamos o, simplemente, olvidamos. Comemos, bebemos, amamos, defecamos, consumimos, siempre consumimos, algunas veces  descubrimos el brillo de algo nuevo y algo parece elevarse en nosotros y otras veces (las más) nos hundimos, de la misma forma nos levantamos después de la caída. Ayudamos al prójimo o le lanzamos piedras, creemos en Dios (en uno o en otro), montamos en bicicleta, nos desperezamos, bebemos la vida a sorbitos o se nos va, así sin más.


Algunas veces me veo reflejada en la historia de esta mujer. La realidad es como un espejo, un viejo dicho Zen dice que cada uno se asoma y ve en él una parte, según la posición y ángulo desde el que se encuentra. La realidad “es”, como el espejo. Nuestra mirada capta el reflejo, o sea, la interpretación de lo que ocurre según nuestro punto de vista.

A veces me sorprende el reflejo de mi propia cara en la pantalla del ordenador portátil. Estoy escribiendo o mirando algo y, de repente, siento como si unos ojos me observasen al otro lado de la pantalla. Unos ojos que no son mis ojos, analizan, diseccionan cada una de las partes de mi rostro, cada uno de mis pensamientos. Su mirada no es la mía pero sus temores los comparto.

Esta mañana descubrí la historia de Ángela a través de este blog y tuve la sensación de que Ángela es una y muchas a la misma vez, que yo soy ella y ella es yo y cada una de esas mujeres que cada día se aferran a la vida para volverse a levantar.

Miradas digitales

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